A veces he pensado en que mi vida puede ser un musical.
Siempre la música ha sido parte de mi vida, desde que era pequeño solía disfrutarla. Conforme fui creciendo, tenia la costumbre de escuchar la radio y mas tarde con la tecnología pude descargarla y congelarla para siempre, sin necesidad de cintas magnéticas.
Me gusta cantar, sentir la letra de esa canción que tal vez no tenga nada que ver con mi vida, pero cuya melodía me mueve a dejar fluir mi voz en un torrente de interpretación que molesta a algunos, y es que mi voz no es precisamente agradable.
Curiosamente no fui consiente de ese habito mio de cantar movido por la melodía de la canción hasta los 16 años, cuando en la clase de música me puse a cantar "Let it be" de los Beatles con toda la emoción que ponía, sin darme cuenta el profesor y el subdirector escuchaban atentos mi interpretación y cuando termino la canción ambos me felicitaron.
Meses mas tarde el profesor me eligió para interpretar una canción en el festival escolar, afortunadamanete no hubo chance de que me escucharan en esa ocasión. Sino mucho tiempo mas adelante en la clausura de mi generación, donde por única vez me he sentido un rock star.
Pero cuando en la clase de música no tenia opción de cantar, debía de tocar la flauta, el profesor me dijo que era uno de los mejores, comento que le gustaba la forma en la que la música surgía de mi. Y para mi el sonido de la flauta me permitía llegar a notas que mi voz no alcanza y obviamente disfrutaba mucho generando sonidos que me llenaban de buena vibra.
Fue únicamente en la preparatoria donde tuve chance de conocer ese lado mas musical, después opte por el teatro, donde pude aprender a controlar mi voz. Mi actual profesión ha hecho que con los años mi voz deje de sonar entonada al momento de cantar, pero aun así, cantar es un acto reflejo que me nace no sé donde y que me hace sentir bien.
Siempre la música ha sido parte de mi vida, desde que era pequeño solía disfrutarla. Conforme fui creciendo, tenia la costumbre de escuchar la radio y mas tarde con la tecnología pude descargarla y congelarla para siempre, sin necesidad de cintas magnéticas.
Me gusta cantar, sentir la letra de esa canción que tal vez no tenga nada que ver con mi vida, pero cuya melodía me mueve a dejar fluir mi voz en un torrente de interpretación que molesta a algunos, y es que mi voz no es precisamente agradable.
Curiosamente no fui consiente de ese habito mio de cantar movido por la melodía de la canción hasta los 16 años, cuando en la clase de música me puse a cantar "Let it be" de los Beatles con toda la emoción que ponía, sin darme cuenta el profesor y el subdirector escuchaban atentos mi interpretación y cuando termino la canción ambos me felicitaron.
Meses mas tarde el profesor me eligió para interpretar una canción en el festival escolar, afortunadamanete no hubo chance de que me escucharan en esa ocasión. Sino mucho tiempo mas adelante en la clausura de mi generación, donde por única vez me he sentido un rock star.
Pero cuando en la clase de música no tenia opción de cantar, debía de tocar la flauta, el profesor me dijo que era uno de los mejores, comento que le gustaba la forma en la que la música surgía de mi. Y para mi el sonido de la flauta me permitía llegar a notas que mi voz no alcanza y obviamente disfrutaba mucho generando sonidos que me llenaban de buena vibra.
Fue únicamente en la preparatoria donde tuve chance de conocer ese lado mas musical, después opte por el teatro, donde pude aprender a controlar mi voz. Mi actual profesión ha hecho que con los años mi voz deje de sonar entonada al momento de cantar, pero aun así, cantar es un acto reflejo que me nace no sé donde y que me hace sentir bien.
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