Ya había mencionado que en ocasiones mis comentarios al aire pueden no ser muy bien vistos aunque en realidad yo no tenga la intención de dañar, a veces el inconsciente hace que me desquite con frases cargadas de sarcasmo o ironía, pero el chiste es chingar de quien hablo.
Pero en ocasiones al menos para mi es necesario siempre expresar lo que me pasa, de un modo u otro, es que a veces lo que digo puede causar consecuencias, bueno mas bien creo que aplican siempre las leyes de Newton, siempre a toda acción corresponde una reacción, bla, bla, bla...
Sí bien estaba hasta la madre de mi situación laboral, opte por mandar todo a chingar a su madre y cumplir lo que me corresponde.
Pero me pongo a pensar en lo que una frase en mal momento puede hacer, o en caso contrario una frase de apoyo puede hacer la diferencia, como sea el punto es que es bien fácil hablar, pero no darnos cuenta de las consecuencias de lo que decimos, en ocasiones sin pensarlo podemos tirar mierda, o podemos hablar a espaldas de alguien, o simplemente criticamos por chingar y cada una de esas expresiones tienen efectos, obviamente no siempre suele ser algo bueno.
En mi experiencia al ser tan directo con la verdad me ha traído muchos problemas, creo que en esta ocasión esa no ha sido la excepción, creo que lo que he dicho (pero también aplica lo que no) me ocasionaron una serie de malos entendidos que terminaron por enredar todo y afectar mi trabajo pero sobre todo mi salud mental. Lo cual obviamente no es nada chido.
He aprendido con los años a moderar y medir mis palabras, sopesar las frases, pero sobre todo pensar en que es lo que va a salir de mi boca para no herir susceptibilidades ajenas. Pero creo que la leccion de esta experiencia es basicamente reconocer que la comunicación siempre se debe procurar realizar de manera correcta para evitar situaciones incomodas.
De lo que he dicho no suelo arrepentirme, pero si suelo reconocer cuando la he cagado y siempre se disculparme y aceptar las consecuencias de mis palabras.
Pero en ocasiones al menos para mi es necesario siempre expresar lo que me pasa, de un modo u otro, es que a veces lo que digo puede causar consecuencias, bueno mas bien creo que aplican siempre las leyes de Newton, siempre a toda acción corresponde una reacción, bla, bla, bla...
Sí bien estaba hasta la madre de mi situación laboral, opte por mandar todo a chingar a su madre y cumplir lo que me corresponde.
Pero me pongo a pensar en lo que una frase en mal momento puede hacer, o en caso contrario una frase de apoyo puede hacer la diferencia, como sea el punto es que es bien fácil hablar, pero no darnos cuenta de las consecuencias de lo que decimos, en ocasiones sin pensarlo podemos tirar mierda, o podemos hablar a espaldas de alguien, o simplemente criticamos por chingar y cada una de esas expresiones tienen efectos, obviamente no siempre suele ser algo bueno.
En mi experiencia al ser tan directo con la verdad me ha traído muchos problemas, creo que en esta ocasión esa no ha sido la excepción, creo que lo que he dicho (pero también aplica lo que no) me ocasionaron una serie de malos entendidos que terminaron por enredar todo y afectar mi trabajo pero sobre todo mi salud mental. Lo cual obviamente no es nada chido.
He aprendido con los años a moderar y medir mis palabras, sopesar las frases, pero sobre todo pensar en que es lo que va a salir de mi boca para no herir susceptibilidades ajenas. Pero creo que la leccion de esta experiencia es basicamente reconocer que la comunicación siempre se debe procurar realizar de manera correcta para evitar situaciones incomodas.
De lo que he dicho no suelo arrepentirme, pero si suelo reconocer cuando la he cagado y siempre se disculparme y aceptar las consecuencias de mis palabras.
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